Esta reducción soluciona el problema del sobrecalentamiento de la bomba de dirección asistida original durante la conducción enérgica, como el tiempo en la pista. La bomba de dirección asistida impulsada a estas velocidades más bajas la mantiene funcionando más fría, sin ninguna diferencia en la sensación de dirección.

La polea reduce la velocidad de la bomba de dirección asistida al tener un diámetro de correa más grande. El aumento de tamaño no es suficiente para requerir un cinturón nuevo; y, a diferencia de la polea del cigüeñal, los pernos que sujetan esta polea se pueden reutilizar.

La polea de dirección asistida de submarcha ofrece la ventaja de reducir la velocidad de la bomba para ayudar a mantener el líquido de la dirección asistida más frío, sin tener que subconducir todo el sistema (para aquellos que no desean seguir esa ruta).

El protector de moldura de plástico que rodea la polea deberá recortarse para instalarlo. Este recorte no interferirá con ninguna operación mecánica.